
Desde hace unas semanas el Ayuntamiento de Madrid ha irrumpido con una campaña masiva de propaganda de las excelencias de esta ciudad. Podemos encontrar sus carteles en paradas de autobuses, estaciones de metro, quioscos, etc., con animados dibujos en los que dice que “Todo está en Madrid” y remite a una página web donde se detalla todo lo que podemos encontrar en la ciudad tanto por distritos como por categorías. Cuando accedemos a dicha página web (todoestaenmadrid.com) e intentamos conocer los recursos en materia de salud de la ciudad capital del Estado no salimos de la perplejidad.
En el apartado de Salud nos da 256 resultados entre los que encontramos ópticas, farmacias, centros de medicina estética, centros de formación de terapias manuales, herbolarios, clínicas dentales, clínicas de fisioterapia, podología, dietéticas, centros para “mejorar la salud de las personas y del planeta”, etc., incluso un centro para “mejorar el rendimiento del surfista madrileño”.
En la ciudad de Madrid sabemos que están situados algunos de los mejores hospitales públicos del Estado y que son referentes nacionales e internacionales de muchas especialidades: La Paz, 12 de octubre, Gregorio Marañón, Ramón y Cajal solo por citar a los más grandes y conocidos. Por más que se busca en el listado de lo que está en Madrid no aparecen ninguno de ellos, pero tampoco otros más pequeños ni ningún centro de salud ni de especialidades que pertenezca al Servicio Madrileño de Salud. Parece que a los promotores de la campaña para exaltar las virtudes de Madrid (por cierto, pagada con fondos Next Generation de la UE, del Gobierno de España y del Plan de Recuperación, Transición y Resiliencia) no les interesa lo que realmente son los recursos sanitarios que dispone esta ciudad y prefiere centrarse solamente en aquellos que sean privados. Lamentablemente, el sistema sanitario público apenas cubre las necesidades de la población en materias como odontología, fisioterapia, podología y las personas que lo necesiten (y puedan pagarlo) tienen que recurrir a la asistencia privada. Pero de eso a esconder lo que es realmente importante y está al acceso de los y las madrileñas va una gran distancia.
Además, esta campaña no tiene en cuenta las grandes demoras que tiene la población madrileña para acceder a la Atención Primaria, las consultas externas del especialista, pruebas diagnósticas o intervenciones quirúrgicas, listas de espera que impiden a la población el acceso a una atención sanitaria que necesitan. Parece que todo está en Madrid, a excepción del derecho al acceso a una atención sanitaria de calidad.
Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid
1 de diciembre de 2022